Dejar de fumar es una meta recurrente entre los fumadores cuando se vuelven conscientes del daño que el tabaco trae a su organismo. En ocasiones, un fumador empedernido busca métodos para abandonar el vicio tras un suceso impactante: el fallecimiento de un ser querido, el diagnóstico de una enfermedad, la falta de aire al correr o practicar su deporte favorito. Sin embargo, tras un tiempo, vuelve a su consumo regular.
Los parches de nicotina son uno de los métodos más conocidos para dejar de fumar, sin embargo su efectividad es del 15 al 18%, por lo que no son una alternativa real para dejar de consumir tabaco a largo plazo. A continuación te contaremos por qué, y te daremos una alternativa que ha demostrado tener más del 90% de efectividad.
¿Qué son los parches para dejar de fumar de nicotina?
Como su nombre lo indica, son parches transdérmicos que se aplican directamente sobre la piel una vez al día. En general deben cambiarse a la misma hora (usualmente por las mañanas). Un parche de nicotina reduce los síntomas de la abstinencia que se experimentan al dejar de fumar, como la ansiedad. Es una terapia de reemplazo de nicotina.
Si bien se vende como medicamentos sin receta, lo mejor es que acudas con tu médico antes de optar por los parches. El médico indicará a través de una receta si es una alternativa adecuada para tu salud y la dosis adaptada a tus características físicas y necesidades.
¿Cómo se usan los parches para dejar de fumar?
De acuerdo con la marca, un parche contiene nicotina en dosis diferentes para proporcionar alivio. Se recomienda elegirlos con base a la cantidad de cigarros que la persona se fuma cada día. Si fumas más de 10 cigarrillos al día, los fabricantes de marcas de parches recomiendan aplicar dosis de 21mg cada 24 horas por 6 semanas; a los consumidores de menos de 10 cigarrillos les recomiendan dosis de 14mg cada 24 horas; a los consumidores de menos de 5 cigarrillos o que ya han pasado por las primeras etapas de los parches se les recomienda 7mg cada 24.
Si no has podido dejar de fumar con parches después de cuatro semanas usándolos, es muy probable que el tratamiento no sea efectivo para ti.
Contraindicaciones de los parches para dejar de fumar
- Los parches de nicotina pueden causar reacciones alérgicas en la piel, irritaciones o comezón.
- Los efectos del parche pueden cambiar si consumes medicamentos como paracetamol, cafeína, diuréticos, insulina, vitaminas, antidepresivos o ansiolíticos.
- Si padeces hipertensión, algún trastorno de la piel, estás embarazada (la nicotina puede dañar al feto) o en periodo de lactancia, abstente de usar parches de nicotina. (En mujeres embarazadas, el parche de nicotina podría provocar daños al feto)
- Informa a tu médico si has padecido o padeces enfermedades cardiacas, si has tenido un infarto, si tienes úlceras, hipertiroidismo, o cualquier otra enfermedad crónica.
- No fumes cigarrillos ni utilices vapeadores o consumas otro producto a base de nicotina, ya que podrías sufrir una sobredosis.
Efectos secundarios
- Enrojecimiento de la piel
- Sarpullido severo o inflamación
- Mareo
- Dolor de cabeza
- Malestar estomacal
- Náusea y vómito
- Diarrea
- Dolor abdominal
Si experimentas alguno de los síntomas mencionados, retírate el parche y llama a tu médico inmediatamente .
¡Peligro! los parches usados pueden causar envenenamiento a niños pequeños y mascotas. Deben desecharse envolviéndolos en su empaque original o en papel aluminio, de preferencia en bolsas aparte de la basura común y depositarse en contenedores de residuos no reciclables.
¿Qué es la nicotina?
Es la sustancia que se extrae de las hojas del tabaco, a la que se atribuye la responsabilidad de provocar la adicción de fumar; de forma sintética es una droga tóxica, con efecto estimulante. Una cantidad de nicotina pequeña provoca euforia y disminución del apetito.
Además de la fabricación de cigarros, la nicotina se utiliza para fabricar insecticida.
Durante la abstinencia de nicotina, las personas se sienten irritables, enojadas, frustradas, nerviosas o tienen problemas de concentración. Es común entre fumadores escuchar que el cigarro les hace sentir relajados, pero es al revés: la falta de nicotina les provoca ese estrés y nerviosismo que solo se alivia al volver a consumirla.
La dosis de nicotina que contiene un parche es menor a la que se obtiene al fumar un cigarrillo, pero se utiliza como parte de la terapia de reemplazo para tratar el tabaquismo, sin los otros químicos que contiene un cigarro, que son alrededor de 4 mil, de las cuales 200 son venenosas y 40 son cancerígenas .
¿Qué pensarías si te dijera que ese cigarro que te fumas mientras lees este artículo tiene arsénico, amoniaco, benceno, metano o alquitrán? Estos son solo algunos de los componentes que se añaden al filtro para darle ese sabor afrutado, mentolado o natural, y que tanto te gusta.
Síntomas de sobredosis de nicotina
- Crisis convulsivas
- Frecuencia cardíaca irregular
- Dificultad para respirar
- Agitación, nerviosismo
- Palpitaciones aceleradas o irregulares
- Sudor frío
- Piel y boca pálida
- Debilidad
- Temblores (agitación)
- Confusión
- Problemas con la visión y la audición
- Presión arterial alta, y posterior baja repentina que puede provocar desmayos
- Respiración acelerada al principio del envenenamiento
- Paro respiratorio
Contacta con los servicios de emergencia de tu localidad si experimentas alguno de estos signos. Si un familiar tuyo los presenta, además retírale el parche cuidadosamente y lávate las manos con agua y jabón.
¡El momento de dejar de fumar de una vez y para siempre, ha llegado!
Razones para dejar de fumar hay muchas; excusas para no poner punto final a la adicción, hay aún más.
Una de las razones por las que los parches no funcionan es porque no sacan el químico del organismo, por lo que la sustancia que genera la adicción sigue ahí. Y al dejar de usar el parche, la mayoría de personas reincide en el consumo de cigarro.
Al igual que con las adicciones al alcohol, a las drogas, incluso a la comida, la clave para dejarlas se encuentra en ti, en que realmente encuentres la convicción para dejar de fumar y no volver a tocar un cigarrillo, sin importar si vas a una fiesta y todos fuman, o si hueles el humo por la calle. Simplemente ya no se te antoja, y hasta puede ser que te moleste un poco.
Conoce el método Abrahamson y dile “adiós para siempre” a dejar de fumar
Un tratamiento para dejar de fumar en una sola sesión, 100% natural, sin medicinas ni químicos que dañen tu organismo y con el 90% de efectividad. Sin importar cuántos cigarros consumas al día, o por cuántos años hayas sido fumador, el método Abrahamson cambiará tu vida a través de la bioenergía.
En Abrahamson Center te ayudaremos a romper las cadenas que aprisionan tu mente y controlan tu vida en una sola sesión: dejarás de ser esclavo de tus impulsos por fumar. La experiencia que vivirás con nosotros te permitirá limpiar tu mente y aura al crear un circuito de sanación interior. Al salir de tu sesión, no sentirás más ese vacío que debes llenar con el cigarro, sentirás plenitud y, como resultado, cambiarás tu vida.
Con más de 35 años de trayectoria, Abrahamson Center te ayudará a dejar la adicción por el cigarro con un tratamiento de bioenergía, además de seguimiento por parte de nuestros coaches, por lo que nos aseguraremos de que tu tratamiento sea un éxito.
Si después de leer la información que preparamos para ti quieres conocer el método Abrahamson, no dudes en contactarnos. Llámanos hoy mismo al 1 800-292-0555 para apartar tu cita, tenemos cupos limitados, así que no esperes más y ponte en contacto con nuestros especialistas, ¡será un gusto atenderte!
